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Despedida a una visita de Jaime Cárdenas

E staban bien empapados en un buen whisky, la tarde moría en el Pueblito Patojo y era la hora de partir…metáforas, crepúsculos, recuerdos atropellados, memorias privilegiadas, poemas reinventados. Diana Campo los acompañaba, una hermosa musa cobriza, luego el terminal de buses y esos boleros de Joe Quijano. Tololón en actitud grave como un auditor vigilante pero también con el corazón hecho puño. Así fue esa despedida en el terminal de Popayán del viejo profesor Cárdenas, uno de los escritores de La Rueda y de sus dolencias poéticas.

El Campanario y el Bicentenario

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E n Popayán las dinámicas culturales, igual que un gran número de residentes, también se trasladan al norte, esta vez hacia el centro comercial El Campanario que junto con la Vicerrectoría de Cultura de la Universidad del Cauca han puesto en los corredores del centro una muestra sobre el Bicentenario de la Independencia que no solo se centra en sus próceres sino que permite observar cómo los colombianos tratamos de construirnos como nación, una nación hecha, como decía David Bushnell , a pesar de sí misma. De hecho, solo aparece un stand dedicado al General Tomás Cipriano de Mosquera , aunque este popayanejo tuvo un destacado papel en la construcción de la nación a lo largo del siglo XIX. Se puede ver su empolvado uniforme de gala militar y curiosidades como su calendario y su catalejo con los que miraría el tiempo y las grandes extensiones de su hacienda en Coconuco. El general Tomás Cipriano de Mosquera Pero lo más llamativo es la muestra de construcción popular: un barrio p

La vida cultural de Popayán languidece

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Vista posterior de a Iglesia de San Francisco, centro de Popayán S algo poco al centro de Popayán . Cuando el dia está despejado y caluroso el parque Caldas en perenne obra parece un gran horno por la piedra adoquinada que refleja el calor y en lugar de refrescar, sofoca. Pero hay ocasiones que me entusiasmo cuando lo hago al amparo de la noche, una vez que pasa el tráfico y el gentío, después de las siete y media, cuando retornan a plenitud las calles del centro histórico con sus luminarias amarillas y puedo ver como el tiempo se detiene y se apaga lentamente el bullicio.  Sin embargo, con los amigos que quedan sequimos echando de menos los cafés de las esquinas, los sitios de reunión y de encuentros que escasean de una manera ominosa. Por ejemplo, el Centro Cultural Bolívar que presentaba cine de excelente calidad, el festival anual de Eurocine entre otros bloques, con una atractiva programación mensual, ha retornado a la Alcaldia de Popayán con un destino bastante

Las mujeres y La Rueda, furtivas miradas

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Las mujeres y La Rueda, furtivas miradas Mario Delgado   Fotografía de Sofia Basto-Dehlinger, desde CasaLoma U na estudiante de Historia de la universidad del Cauca ha leído este blog. Lo ha utilizado como una ayuda para la memoria de su tesis que trata sobre tiempos pasados y movimientos culturales de la ciudad universitaria de Popayán. Quería saber sobre la gente de La Rueda. Me ha preguntado en torno a unos vinos si en La Rueda hubo mujeres escritoras . Y sí que las hubo: Lola Hurtado , Luisa Fernanda Vallejo,  Hilda Restrepo , Luz Marina Cuesta, Rosmira Mosquera, Vicky Ospina... Nos gustaba leer los cuentos de Clarice Lispector , los poemas de Alexandra Pizarnik ... Algunas de ellas, sino todas, quebraron corazones , inspiraron los poemas,  escribieron, rodaron y elevaron la noche... María Stella Perafán y María Victoria Uribe tuvieron a su cargo las ilustraciones de la cuarta y de la sexta entrega de la revista del grupo. Cristina Simmonds, Mariu Mosquera y Liliana Grija

Un texto de Jaime Cárdenas en Maravelí

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UN NUEVO DIA Publicado en la revista Maravelí, El Charco, Nariño, 1991 Primer número de la revista Maravelí V iajes en trenes de humo por extraños parajes donde un árbol rojo canta la canción del ahorcado: laberintos del sueño, travesía que te acerca a la locura. Ahora el canto de los gallos anuncia la mañana. Despiertas, la memoria reconoce el ritmo de la cosas. Sales y acaso un aroma, una melodía que arrastra el viento o un color casi imperceptible te conduzca a la infancia, a aquel territorio del asombro del que te exiliaste a esta rutina que te pesa como un fardo y que en vano buscas abandonar. Has iniciado un nuevo día de tu vida en el país del miedo, caminando por una geografía devastada por la muerte. Un día que puede ser el último de tu existencia, que navega entre el dolor y la alegría y que amas con la certeza de quien sabe que es lo único que tiene. Lucho Calderón Hoy morirás. Pero ¿Quién lo ha decidido? Es tu último día. ¿Quién ordena la

Reencuentro con Miguel Hernández

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J oan Manuel S errat, el cantautor catalán de Mediterráneo, Aquellas pequeñas cosas, Cenicienta de Porcelana, Cantares..., ha lanzado la seguna entrega de la poesía musicada de Miguel Hernández con trece poemas rescatados y que suponen un trabajo arduo.  El album se llama 'Hijo de la luz y de la sombra'. Este poeta fue muy querido por los integrantes de La Rueda. Sus discos a veces copiados y regrabados varias veces en cassetes acercaron el mundo de la poesía española de la guera civil a las tertulias de los jóvenes universitarios del Popayán de fines de los 70's. Muchas veces se cantaron sus canciones en los parques de la ciudad alrededor de un vino, bajo las sauces del parque del Humilladero o bajo las araucarias del parque Caldas. La única separata de la Rueda que se conoce fué dedicada a Miguel Hernández que murió cuando contaba con treinta años en una cárcel de la dictadura de Franco. Eran cuatro hojas con poemas. En ella, Tololón puso a circular la foto del

Vuelta a empezar!

C on Gonzalo volvemos a empezar este proyecto, esta vez sin Felipe. Quedamos con compromisos concretos para un mes. Despues de editarlos, seleccionaremos los textos. De esta manera tendremos listo el material y a concretar el editor.

La ilusión que se va

E n un correo le comentaba a Gonzalo Buenahora que la mala noticia de principios de diciembre del editor principal y el hecho de no conocer lo que estaba pasando con el libro destruyeron nuestra ilusión de publicar este libro. Era una ilusión construida desde hace tiempo pero que había crecido a lo largo del 2009. Incluso la pequeña polémica que se generó con Carlos Fajardo respecto a la poética de La Rueda le daba un buen ambiente a la publicación del libro. Queda por delante retomar entre Gonzalo y yo este proyecto. Gonzalo tiene más tiempo para elegir los materiales y lograr reflejar el ambiente cultural y universitario de Popayán y de la Universidad del Cauca de los finales de los 70's y los principios de los 80's. También tendremos que elegir a alguien que haga un prólogo...

No hay noticias del editor

Y a estamos a 19 de diciembre y salvo el lapidario correo electrónico del editor no hay noticias acerca de la edición del libro. Tampoco he recibido comentarios de Gonzalo o de Carlos Fajardo quién estaba siguiendo de cerca este proyecto. Una de las opciones que he visto factibles es que Felipe haga una cotizacion con un editor contactado en Quito o con las pruebas tentar suerte en Barcelona. Pero hace falta tenerlas a mano y el editor no las ha enviado.

Malas nuevas

  N uestro editor nos dice que por un problema con  la Gobernación del Cauca, dejó sin financiación la colección del 2010 en la cual el grupo Poliedro habìa manifestado incluir, en coedición, nuestro libro. Dice además que él no está en condiciones de asumir costos adicionales y que exploremos otros caminos.

El truquito y la maroma. Cocaína, traquetos y pistolocos en Nueva York.

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J uan Cajas, antropólogo de la Universidad del Cauca y que trabaja en México, presentó en Popayán su libro "El truquito y la maroma. Cocaína, traquetos y pistolocos en Nueva York”  editado en ese país y ganador del Premio Fray Bernardino de Sahagún del INAH .  Existe también una edición disponible de la Editorial de la Universidad del Cauca, de 2009. Carátula del libro de la Editorial Universidad del Cauca En la introducción, Juan Cajas dice sobre su libro : "Estas páginas son la historia de un viaje, la memoria de una expedición antropológica al interior de Nueva York, la moderna capital del siglo XX, el faro mítico en la cartografía imaginaria de los inmigrantes colombianos que le 'ganaron a la vida': puerto utópico del sudamerican dream ". Juan Cajas La política desastrosa que ha llevado Estados Unidos con el tema de las drogas, el narcotráfico, las fumigaciones con Glifosato y la violencia que conllevan, pero esta vez en la ciudad de Nueva York,

El único suplemento de La Rueda fue dedicado a Miguel Hernández.

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El poeta (De rodillas) con otros milicianos, 1937 Mario Delgado M uchos de los integrantes de La Rueda escucharon por primera vez los poemas de Miguel Hernández en las canciones de Joan Manuel Serrat. Y de contera sobre la guerra civil española pues el poeta murió a los 32 años en Alicante, en una de las cárceles del régimen franquista, donde la muerte acechaba y la desesperación colmaba el más mínimo instante. Pero tuvo el tiempo suficiente para enamorarse de las palabras. Y dejar sus poemarios para que décadas después los difundiera Joan Manuel Serrat en un disco inolvidable. De esta manera muchas de las tertulias y noches embriagadas de La Rueda transcurrieron con "Llegó con tres heridas", "Para la libertad", o "Menos tu vientre". Los poemas de Miguel Hernández se tornaron en una metáfora de lo que queríamos gritar en tiempos del estatuto de seguridad del entonces presidente Turbay, algo semejante a la seguridad democrática que se ventila cotidi